Una de las herramientas básicas demandadas en el nuevo escenario educativo son las TICS y tener las capacidades y competencias suficientes para saber hacer el tratamiento adecuado de la información con dichas herramientas digitales.
De modo que desde los centros de formación hasta todos los entornos laborales deberían adaptar tanto sus procesos como sus niveles de tecnología a la diversidad posible entre las personas con discapacidad o diferenciación socio/cultural, de manera que los talentos incluidos en todo ser humano, sea cual sea su condición o situación física y mental, pueda ser aprovechada por la sociedad y el mundo empresarial.
Sólo hay que recordar que todas las destrezas incluidas en cada persona se desenvuelven desde distintos canales.
Cuando estamos ante personas NEA (con necesidades especificas de apoyo), es cuando nos damos cuenta del potencial que generan y no siempre contamos con los materiales ni el personal adaptado, y perdemos una gran cantidad de “producto” intangible en ideas y aportaciones que no estamos preparados para recibir.
No estamos hablando de las barreras arquitectónicas únicamente, ni de dificultades técnicas, sino de mentalidad de aprendizaje y personal receptivo en los entornos.
Es evidente que hay líneas en las que primero hay que entregar disponibilidad para ejecución y ayuda a las diferencias, desde puntos de apoyo especial en materia de lenguaje, interrelaciones personales, diferencias de estructura de pensamiento, motivación, adaptación del espacio, psicocogniciones especiales, fuentes de estimulación, nivel y velocidad de aprendizaje, psicomotricidad, etc., para lo cual primero nos debemos preparar nosotros y entonces saber cómo disfrutar sus también especiales habilidades y maneras de ver y sentir el mundo, lo cual puede resultar tremendamente enriquecedor para el resto de compañeros de entorno socio laboral o educativo.
En nuestra era digital los muros ante la diversidad de capacidades se pueden mejorar desde muchas técnicas y canales de introducción más ágiles en su fluidez y permisividad de adaptación a las diferencias, encontrando algunas herramientas muy eficaces en este abordaje de la integración.
Algunas de ellas son por ejemplo: los videojuegos, muy utilizados como sistemas de introducción en la competitividad, puesta a prueba y medición de motivación, las asociaciones en trabajos a través de procesos guiados de memorización como las webquest, así como los blogs o wikis donde la interacción con el resto de personas de cada entorno se efectúa desde estructuras de comunicación abiertas y que permiten desde cualquier lugar y medio encontrar y compartir información y sensibilidades, sin la agresividad funcional de la “reunión” o agrupación presencial, donde las diferencias se ven y la barrera mental y social entorpece el acercamiento e introducción de las personas diferentes.
Porque después de conocerlos nos gustan y entendemos mejor, pero ¿Cómo llegamos a conocerlos?
Comparto con vosotros un post sobre el Día Mundial de la Concienciación sobre el Autismo: “Hoy el mundo se viste de azul“
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Excelente iniciativa. Lo primero, y quizás lo más difícil, sea encontrar a las personas adecuadas para abordar este trabajo, pues la discriminación galopa; por lo demás, ahí esta la tecnología, a un solo clic. Esa proa visionaria, oculta, en realidad puede ser una fuente inagotable de ideas frescas, diferentes: Es buen tiempo pues para rescatar a estas personas olvidadas por la sociedad a causa de sus limitaciones físicas o mentales.