Cómo manejar tus puntos fuertes en una entrevista

En una entrevista de trabajo, desde hace ya algunos años los entrevistadores no solo se centran en el currículum, les interesa saber además como nos comportamos ante determinadas situaciones en la vida tanto en lo personal como en lo profesional.

De este interés surgieron las ya famosas preguntas que nos hacen en las entrevistas sobre cuales creemos nosotros que son nuestros puntos fuertes y nuestros puntos débiles.

En este blog, hemos tratado ya el tema desde dos puntos de vista; hemos hablado de como hacer un DAFO personal: DAFO personal ¿Qué es y por qué debes hacerlo? , y  hemos hablado de como tratar nuestros puntos débiles: Puntos débiles en una entrevista: el DAFO personal;   faltaba el tercero sobre como manejar nuestros puntos fuertes.

La intención de estas preguntas es tener información sobre cómo somos, más allá de nuestra experiencia profesional, para hacerse una idea más global de si somos el candidato que buscan en su empresa.

Reflexión

Ya dijimos en la entrada referente al DAFO que es necesario hacer una reflexión previa sobre quiénes somos, para encontrar tus puntos fuertes y  poder explicarlo después a alguien desconocido, y que esto  implica exponerse y mostrar nuestra personalidad.
Es bueno que nos preparemos las respuestas a este tipo de preguntas para que llegado el momento no nos quedemos en blanco.
Cuando valoremos nuestros puntos fuertes será bueno que no tengamos en cuenta solo el resultado de lo que hemos hecho, sino también el esfuerzo que nos ha costado hacer las cosas y lo que hemos aprendido haciéndolas; ya que sabemos, que hay ocasiones en las que el resultado no depende únicamente de nosotros. Sí es muy importante que
demos valor a quien somos. Valorarnos y sentirnos orgullosos de nosotros mismos es clave para conocernos mejor.

Buscar nuestras fortalezas

Hay muchas cosas que hacemos en nuestra vida diaria y en el trabajo de forma automática y que precisamente por formar parte de nuestra rutina, no le damos el valor que realmente tienen. Como ya dijimos a la hora de hacer un DAFO es bueno que nos sentemos y hagamos una lista con todas aquellas cosas que hacemos en el trabajo, que se nos dan bien, que nos gustan y que habitualmente no pensamos en ellas como parte de nuestras fortalezas, pero que realmente lo son. Eso nos ayudará a sacar ideas sobre nuestras fortalezas para poder hablar de ellas posteriormente en la entrevista.
Y como hemos dicho, no solo en el trabajo sino también en nuestro día a día podemos observar habilidades que tenemos y de las que otros carecen, y que podemos transformarlas en nuestras puntos fuertes.
Para esto, es bueno que preguntemos a la gente de nuestro alrededor, familiares, amigos o compañeros de trabajo, cuáles son los puntos fuertes que ven en nosotros. .
Por último y durante la entrevista, es el momento de poner los puntos fuertes en un contexto laboral. Y será también un punto a nuestro favor que adaptemos nuestra respuesta al puesto para el que nos están entrevistando.
Se hace necesario por lo tanto, que antes de ir a la entrevista, nos informemos toso lo posible sobre la empresa a la que vamos y sobre las habilidades y competencias que requiere el puesto de trabajo al que optamos en la entrevista.
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