Cómo combatir la desmotivación

Hace poco, paseando por la feria del libro, descubrí una obra llena de sabiduría. En este libro titulado “ikigai “de Héctor García y Francesc Miralles -cuya lectura recomiendo- los autores indagan sobre las razones por las que las personas llegan a vivir hasta una edad avanzada. Entre los diversos motivos que fomentan la longevidad hacen especial hincapié en la existencia de una razón para existir, una pasión por la que esforzarse y dar lo mejor de nosotros mismos.

En la actualidad la mayoría de la gente, ante el panorama de crisis que aún se hace notar después de tantos años, se aferran – y no es de extrañar- a trabajos de diversa índole que permitiéndoles pagar las facturas, resultan a la mayoría de la gente de lo más tedioso e incluso desesperante, desechando con ello cualquier esperanza de poder encontrar su pasión y dedicarse a ella, lo que trae consigo un sin fin de efectos negativos.

Desmotivación en el trabajo

Muchas de estas personas también han invertido e invierten mucho tiempo de su vida en formarse para trabajos que en realidad no saben si podrán llegar a desarrollar algún día. Otros tantos han empleado buena parte de su vida en trabajos que les resultaban aceptables y en gran parte agradables pero que con la crisis han ido desapareciendo, obligándoles con ello a buscar opciones que con anterioridad no habrían pensado en aceptar, pero a las que se acogen resignados por las circunstancias reinantes en el contexto laboral actual, creando un clima generalizado de frustración y pesimismo.

Esta necesidad de acogerse a cualquier oportunidad laboral por poco atrayente que les pueda resultar, provoca diversas consecuencias negativas tanto para la vida del trabajador como para el ámbito productivo y laboral de la empresa que los recibe.

Insatisfacción laboral

En lo que se refiere a  la vida  personal  del trabajador , la insatisfacción laboral  por desempeñar un trabajo para el que no se ha formado o que no le resulta realmente atrayente,   puede tener consecuencias muy significativas  que van desde el  empeoramiento de su vida familiar  hasta la reducción de su vida social y el deterioro de su salud física y mental – la frustración por desarrollar un trabajo que no le satisface y por el tiempo que el empleado ha invertido en formarse para un empleo al que  por las circunstancias actuales no ha podido acceder , tiende a empeorar la salud emocional del  mismo llegando a desarrollar cuadros de depresión cuyo nivel varía en función  del grado de ansiedad emocional  que sufra la persona en cuestión , repercutiendo   tal situación  a su vez en su salud física .

LEE  Recursos Humanos y EFQM: cómo obtener la máxima puntuación

Empeoramiento del clima laboral

En el ámbito de la empresa que acoge al trabajador, los pronósticos no son mejores. Tener a un trabajador  que se siente desanimado y frustrado por  no desempeñar un trabajo que le estimule lo suficiente  , puede provocar consecuencias negativas que van desde la bajada de producción y   el empeoramiento del clima laboral  hasta la posible  generación de riesgos laborales adicionales que pueden desencadenar accidentes , y todo por la desilusión y el desánimo que sufre el empleado,  ya que estos factores tienden a disminuir la atención que se pone tanto en el  desarrollo de la actividad laboral como en la observación de las medidas de seguridad que se deben seguir para evitar riesgos innecesarios.

Para paliar este tipo de riesgos e inconvenientes, se pueden tomar desde ambas partes determinadas medidas para conseguir que la relación laboral sea lo más satisfactoria posible y beneficie a todos los implicados.

Técnicas que pueden usarse

En lo que se refiere al trabajador lo primero y lo principal es no rendirse al desaliento. El hecho de que en el momento actual no puedan desarrollar un trabajo que les resulte agradable y estimulante no significa que no puedan encontrar oportunidades profesionales y de crecimiento personal interesantes en esa empresa y   que les permitan a su vez desarrollar su carrera por un rumbo que les parezca más prometedor. Para combatir esta desazón pueden usarse determinadas técnicas:

– En primer lugar, pueden interesarse por las oportunidades profesionales que ofrece su actividad laboral preguntando a sus superiores, para lo cual es necesario que existan canales de comunicación que permitan a los empleados expresar sus dudas, sus propuestas, sus iniciativas y sus anhelos en un clima de total confianza y serenidad favoreciendo así la mejora de la atmósfera laboral existente.

LEE  ¿Cómo hacer una entrevista de trabajo a los millennials?

– Pueden ir introduciéndose en la cultura de la organización y en su ambiente comunitario mediante la realización de las actividades tanto caritativas como lúdicas que pueda ofrecer su empresa (aquí destacan los deportes que fomentan el trabajo en equipo y el apoyo mutuo). Estas actividades no solo ayudan a crean un equipo laboral más cohesionado y comunicativo, sino que también sirven como medio para transmitir a los empleados los principios que son inherentes a la política de la empresa (generosidad, responsabilidad social, resiliencia. etc.).

– Pueden interesarse también por las actividades formativas que ofrece a la empresa y que pueden serles de utilidad en el desarrollo de su carrera.

Motivación de los empleados

En lo que se refiere a la empresa, puede motivar a sus empleados con las siguientes iniciativas:

– Pueden crear programas específicos a cargo de gente especializada (en coaching y formación, por ejemplo) que se dediquen a asesorar a los trabajadores en las diferentes oportunidades profesionales que su trabajo actual les otorga, siempre en un ambiente abierto y adecuado que permita   dispensar el mejor trato y apoyo a los empleados. Esto favorecerá también a la empresa, ya que al sentir el empleado que es importante para la organización aumentará su sentimiento de lealtad hacia la misma, lo que le llevará igualmente a poner todo su empeño en mejorar su rendimiento laboral. También es una técnica útil para retener el talento.

– Fomentar un clima laboral acogedor y en lo posible libre de estrés. Esto ayuda a que el empleado se sienta integrado y con ganas de dar lo mejor de sí. El ambiente laboral negativo en cambio solo consigue hundir la autoestima del trabajador haciendo que se sienta incapaz de ejercer su trabajo de manera correcta afectando así no solo a su desempeño, sino también al desempeño de los empleados que se encuentran trabajando a su alrededor.

– La empresa debe invertir un esfuerzo importante en ofrecer oportunidades de desarrollo formativo al trabajador. Si el empleado se da cuenta de que le empresa confía en él lo suficiente como para invertir en su formación, aunque no esté obligada a hacerlo, en la mayoría de los casos le devolverá esa inversión con creces, poniendo toda su ilusión y capacidades en ayudar a que la empresa alcance sus objetivos empresariales y sociales. Esto también beneficiará a la organización en el sentido de que obtendrá personal más formado y especializado, lo que supone una clara ventaja competitiva frente a las demás organizaciones que no ocupan sus esfuerzos en estos menesteres.

LEE  Cómo ser una empresa que sabe dejar huella

– Debe implantarse también un sistema de recompensas para aquellos empleados que dan lo mejor de sí mismos y contribuyen a conseguir los objetivos colectivos.

Así , ambas partes  ayudándose mutuamente con la mejor disposición pueden  conseguir realizar no solo los objetivos que se han marcado , sino muchos otros que en un principio podían parecer inalcanzables, pero que con la colaboración de todos  se pueden transformar  en algo tangible  ayudando al mismo tiempo a crecer y a sentirse realizados a todos los miembros del entramado empresarial ( contribuyendo incluso a que los empleados encuentre su pasión  en el ámbito laboral de la organización  ) , mejorando con  todo ello  la vida de las personas integradas en ella de manera increíble.  Como dijo Helen Keller “solos podemos hacer muy poco, juntos podemos hacer mucho”.

 

Beatriz Obregón Mantecón

Alumna del Máster de Dirección y Gestión de RRHH en IMF Smart Education

 

 

Las dos pestañas siguientes cambian el contenido a continuación.
Equipo de colaboradores compuesto por el equipo de tutores, profesores y colaboradores con amplia experiencia en gestión de Recursos Humanos en el ámbito empresarial. Los títulos de máster y experto universitario de nuestra entidad educativa cuentan con los avales de la Universidad Camilo José Cela, de AEDIPE y de la ANECA. Con nosotros puedes especializarte en Dirección y Gestión de Recursos Humanos y en Gestión del Talento. Así como combinar esta especialización con un MBA. Nustros cursos se realizan de forma <a href="https://www.imf-formacion.com/formacion-presencial"presencial, online o semipresencial.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *